viernes, 18 de abril de 2014

Messier 7: cúmulo de Ptolomeo



En las noches de finales del otoño y principios de inviernos austral se leva la constelación de escorpión, rica en objetos celestes al alcance del aficionado. En esta entrega hablaremos de uno de los cuerpos celestes más emblemáticos, Messier 7 también llamado cúmulo de Ptolomeo.

Messier 7 o M7 , también designado NGC 6475 es un cúmulo abierto de estrellas en la constelación del Escorpión. El cúmulo es fácilmente detectable a simple vista incluso con cierta cantidad de contaminación luminosa, cerca del "aguijón" del escorpión. Tiene por coordenadas celestes una ascensión recta de 17 h 53 m 51,2 s y una declinación de -34,8 °, que lo vuelve el más meridional de los objetos Messier.

M7 ha sido conocido desde la antigüedad, fue registrado por primera vez por el astrónomo grecorromano del siglo primero Ptolomeo (Por eso el nombre de cúmulo de Ptolomeo), quien la describió como una nebulosa en el año 130 DC. El astrónomo italiano Giovanni Batista Hodierna lo observó antes de 1654 y contó cerca de 30 estrellas en el mismo. En 1764, el astrónomo francés Charles Messier catalogó el cúmulo como el séptimo miembro en su lista de objetos similares a cometas los cometas (Messier 7).
Ptolomeo
Observaciones telescópicas del cúmulo revelan unas 80 estrellas dentro de un campo de visión de 1,3 °. La distancia estimada del cúmulo es de 980 años luz , esto corresponde a un diámetro real de 25 años luz. Tiene una masa combinada de cerca de 735 veces la masa del sol. La edad del cúmulo es de alrededor de 200 millones de años, mientras que la más brillante estrella de miembro es de magnitud 5,6.

Al observarlo con binoculares 15x70 la vista es espectacular, observándose el rico campo estelar donde se encuentra. Al observarlo mediante un telescopio la vista será abrumadora, con estrellas de todas las magnitudes saturando el campo de observación. Para disfrutar de este objeto conviene no forzar los aumentos.

En telescopios mayores el cúmulo se vuelve difícil de observar debido a la gran cantidad de estrellas de fondo, ya que el cúmulo se encuentra sobre la vía láctea. en fin uno de los mejores objetos del cielo profundo para observar.

domingo, 13 de abril de 2014

Caldwell 1


El primer objeto Caldwell (C 1) es un objeto un tanto peculiar. Caldwell 1, que recibe además la designacion NGC 188, es un cumulo abierto de estrellas ubicado a solo 5 grados del polo norte celeste. Ubicado a 5.400 años luz de nuestro planeta se halla en los limites de la constelación de Cefeo.

Este cúmulo es llamativo por lo siguiente, las fuerzas gravitatorias de nuestra galaxia, tiran de las estrellas de un cumulo abierto haciendo que este se disperse en un periodo de unos pocos millones de años. por ejemplo nuestro sol se formó en un cumulo abierto pero al pasar el tiempo el grupo fue separándose y hoy no sabemos donde podrían estar las hermanas del sol. La familia del Sol posiblemente se separó unos 1.000 millones de años después de su formación y desde entonces cada una de sus miembros sigue su propio viaje, solas o en forma de sistemas dobles o triples.
Caldwell 1
Pero C1 al hallarse lejos del nucleo de la via lactea y a 1.800 años luz por encima del plano galactico es poco influenciado por las perturbaciones gravitatorias de nuestra galaxia. Eso lo hace uno de los cúmulos abiertos más antiguos. Se calcula que su edad es de unos 6. 400 ó 6.500 millones de años, aunque algunos autores han aumentado esta cifra hasta 10 ó 12.000 millones de años.
Nuestra estrella posiblemente no nació sola, sino que lo hizo junto a muchas más dentro de una nebulosa.
Fue descubierto por el astrónomo John Herschel el 3 de noviembre de 1831. Posee una magnitud de +8,1 y abarca unos 15º de arco en el cielo. Se lo puede identificar incluso con unos prismáticos de 10x50, pero la resolución en estrellas sólo es posible con telescopios de al menos 120 mm de apertura. Los componentes menos luminosos son de décima magnitud, pero la mayor parte son de la decimotercera en adelante.