lunes, 22 de agosto de 2011

Naves espaciales del Futuro VI

Bigelow Aerospace.



Para esta ocasión no veremos una nave espacial propiamente, sino un revolucionario concepto de estación espacial "inflable".


Bigelow Aerospace es una empresa privada fundada por el magnate hotelero Robert Bigelow con el objetivo de fabricar estaciones espaciales para uso comercial. La compañía tiene su base y fábrica de ensamblaje cerca de Las Vegas, con una planta de construcción en Houston y oficinas en Washington D.C.



La idea de lanzar una estructura inflable al espacio no es nueva. La NASA ya lo hizo con los satélites de comunicaciones Echo el año 1960.

En la década de los 90 la NASA intentó desarrollar un módulo inflable para la Estación Espacial Internacional llamado Transhab. El Transhab iba a utilizar una tecnología innovadora: el módulo, en vez de ser rígido, iba a ser inflable. La principal ventaja de un módulo inflable es que resulta mucho más ligero que uno rígido, ya que se puede lanzar plegado. A simple vista puede parecer que un módulo inflable resultará menos seguro que uno rígido, sin embargo la adición de múltiples capas de material hacen que, según Bigelow, estos módulos sean más seguros que los convencionales.





La compañía prevé que las tecnologías que está desarrollando reduzcan los costes de acceso al espacio. Esperan que la reducción de precios permita que otras empresas privadas les compren las estaciones para fines comerciales (hoteles, fábricas, etc.). La idea clave en la que Bigelow Aerospace basa su diseño es que sus módulos no son rígidos sino expandibles (entiéndase son como globos). El módulo se lanza al espacio plegado y, una vez allí, se expande hasta alcanzar su tamaño definitivo. Este sistema permite que, para el mismo peso, un módulo inflable sea mucho más grande que uno rígido.




Las paredes están fabricadas con múltiples capas. En el interior existen unas capas de plástico que tienen el objetivo de mantener la presión y la forma del módulo. Las capas exteriores estarán fabricadas con materiales muy resistentes como el Kevlar y el Vectran, alternados con gomaespuma. En total el escudo suma unos 4 dm de espesor. Según Bigelow, el escudo tiene la misma capacidad de frenado que uno convencional de aluminio de 12 cm de espesor, lo que hace que los módulos sean incluso más resistentes a impactos de basura espacial y meteoritos que los convencionales.

Varios prototipos de estaciones "Inflables" de Bigelow.

BA-330.

El BA-300 (acrónimo de "Bigelow Aerospace 330 m³") será el último prototipo de Bigelow Aerospace.  Será el primer módulo utilizable para la construcción de hábitats en el espacio. 


Con posterioridad Bigelow Aerospace pretende construir una estación espacial formada por módulos BA-330. Esta estación recibiría el nombre de Commercial Space Station Skywalker (abreviada comúnmente a CSS Skywalker). Bigelow Aerospace espera que los primeros billetes a sus estaciones espaciales cuesten 7'9 millones de dólares, un precio considerablemente inferior a los 30 que se están cobrando a los turistas que acceden a la Estación Espacial Internacional. A este precio se espera que la estación tenga unos treinta visitantes por año.


El primer módulo completamente operativo volará en 2014, la compañía tiene un contrato con la empresa SpaceX, para utilizar su cohete Falcon-9.

Falcon-9.
Ahora queda otra cuestión, como la empresa no fabrica naves espaciales se hace necesario responder a la pregunta¿Qué nave llevará a los turistas a estas estaciones espaciales? El vehículo elegido es el "Crew Space Transportation - 100" de Boeig, que llevará turistas y carga a las mismas.


C-100 de Boeing.


C-100 acoplandose a una estación Bigelow.

Se ha barajado la posibilidad de incorporar un módulo BA-300 a la estación espacial internacional con el fin de aumentar su espacio utilizable.

BA-300 acoplado a la ISS.


De momento la compañía ya ha lanzado los dos primeros prototipos. Se esperan tres prototipos más antes de que, hacia el 2015, pueda comenzar a funcionar el primer "hotel espacial".








2 comentarios:

  1. Cuando el futuro nos alcanza, la ciencia ficción pasa a ser, ciencia aplicada, y nosotros.... somos historia.

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  2. Muy cierto, lo que más me llama la atención es que esta tecnología se habría obtenido hace 20 años si los estados invirtieran en facilitar el acceso de la población al espacio, por más espectaculares que parezcan. Pero bueno no ocurrió así, es interesante ver como, de a poco, las empresas privadas se meten al negocio del espacio.

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