miércoles, 27 de julio de 2011

Visitando al Camaleón.


El camaleón (chamaeleon) es una pequeña constelación austral situada el las cercanías del polo sur entre Musca y Octante. Es una región del firmamento sur no muy visitada, sin estrellas muy brillantes



Fronteras de la constelación.


El mismo forma parte de una docena de constelaciones delineadas por los astrónomos holandeses Pieter Dirkszoon Keyser and Frederick de Houtman durante su viaje a los mares del sur, a bordo del "Hollandia", con el fin de cartografiar el firmamento austral.


Esta porción del cielo contiene a la "Nube oscura del Camaleón" un vivero estelar situado a alrededor de 500 años luz de la tierra, donde estrellas tipo "T-tauri" están siendo formadas.


Nube Oscura del Camaleón.
 Mucho más extensa que la anterior, abarcando parte de las constelaciones vecinas, hallamos al "Complejo Camaleón" (Chamaelon Complex) una enorme región de formación estelar compuesta por varias nebulosas oscuras, famosa por ser una intensa fuente de rayos X dentro de la galaxia.

Complejo Camaleón.



Otro cuerpo destacado de la pequeña constelación es HH49/50 pertenece al catalogo Herbig Haro, y se ha ganado el apodo de "Tornado Cósmico". En realidad es un potente chorro de materia estelar con unos 8 años luz de longitud, producido por una estrella embrionaria, la misma se encuentra en la parte superior de la fotografía, la estrella que aparece hacia donde parece apuntar el chorro se encuentra ahí solo de casualidad.

Tornado Cósmico.


La zona está dominada por nebulosas oscuras y distantes galaxias, la mayoría para grandes aperturas y cielos oscuros, salvo algunos objetos accesibles a pequeños instrumentos de aficionado y que visitaremos en este recorrido por esta constelación.

Mapa de la zona.

Versión imprimible.
Nuestra primera parada (1) será un objeto accesible para binoculares. Se trata de la estrella delta(δ) Chamaeleontis, denominación aportada por Bayer y que es  utilizada para dos estrellas distintas: δ1, una gigante naranja de magnitud 5,46, y δ2, subgigante blanco-azulada de magnitud 4,45. Están separadas algo más de 4 minutos de arco. La mejor visión de este par de da con prismáticos 10x50, preferentemente si están fijos sobre un trípode. Si utilizaremos un telescopio, conviene emplear la menor cantidad de aumentos disponibles. 

Delta(δ) Chamaeleontis.

En las cercanías encontraremos a nuestro próximo destino, en este caso se trata de una bella nebulosa planetaria. Se trata de NGC 3195 (2) . 

De magnitud aparente 11,6, es la más austral entre todas las nebulosas planetarias brillantes, motivo por el cual  no es observable desde latitudes septentrionales. Se encuentra a 1,5º  de la estrella delta Chamaeleontis. Esta planetaria es, junto a NGC 3918, una de las nebulosas más populares de los cielos australes.

Visualmente, NGC 3195 tiene una forma ligeramente ovalada, con un tamaño de 40 × 35 segundos de arco. Se aproxima a nosotros a razón de 17 km/s, mientras que la nebulosidad se expande a unos 40 km/s. Se estima que su distancia a la Tierra es de 5500 años luz.

NGC 3195

Puede ser detectada desde el campo, con unos 10 cm de apertura, aunque con buen cielo se la "intuira" con telescopios de 3 pulgadas. Desde la ciudad harán falta 15 cm como mínimo para verla bien.

Para nuestra siguiente parada (3) visitaremos un objeto "nuevo" en el amplio sentido de la palabra. En 1999 fue descubierto un nuevo cúmulo abierto en la constelación, centrado alrededor de la estrella eta ( η) Chamaeleontis. El cúmulo, ahora conocido como Eta Chamaeleontis cluster or Mamajek 1, con tan solo 8 millones de años de edad, estamos ante un conglomerado joven. Se encuentra relativamente cercano, a unos 316 años luz de la tierra. Aparentemente se formó en el complejo Camaleón.

Eta Chamaeleontis cluster

Exploraremos ahora un autentico (4) desafió observacional, el cúmulo globular E 3. Con una magnitud visual de +11,5 y midiendo 5 minutos de arco, es uno de los globulares más débiles conocidos. Se halla a "solo" 14.000 años luz del sistema solar, situado detrás de las nubes oscuras de esta parte del cielo, siendo este el principal motivo de su dificultad a la hora de observarlo.

Para ver este objeto son necesarios cielos muy oscuros y limpios, además de aperturas iguales o mayores a los 20 cm, donde se lo captará como un pequeño parche algodonoso bastante débil.

E 3

Por ultimo nos encontraremos con un objetivo (5) un tanto peculiar, una galaxia verdaderamente extraño. Se trata de NGC 2915 conocida como la galaxia espiral "oscura" veamos porqué.

La galaxia se halla catalogada como una enana BCD (siglas en ingles de enana compacta azul), posee una magnitud visual de + 12,5, lo que la hace accesible a instrumentos medianos de aficionado, pero aparte de eso no se ve nada fuera de lo normal como muestra la siguiente imagen.

NGC 2915 en luz visible.
  
Como se puede observar, la galaxia no es precisamente destable, una enana más de las muchas que hay allá afuera y no llamaría nuestra atención de no ser por su "aspecto espiral", no observable en luz visible, sino en ondas de radio, como vemos a continuación.

NGC 2915 en ondas de radio. 


Una autentica y enorme galaxia en espiral se revela ante nosotros cuando examinamos a NGC 2915 en el rango de las ondas de radio. El color azul representa a los átomos de hidrógeno neutro que, por alguna razón, no han formado estrellas. Se desconoce bastante sobre estas galaxias,  por qué el hidrógeno mantiene esta forma, que ocurre con la formación estelar ni porque aparentemente exite mucha "Materia Oscura" en las mismas.

Para observar el núcleo galáctico (única parte visible) se requieren cielos oscuros y telescopios de por lo menos 15 cm de diámetro. Al ver la fotografía me pregunto, ¿Qué habría pasado con NGC 2915 si hubiera sido una galaxia "normal"? Pues si fuera normal, estando a una distancia cercana de 15 millones de años luz, posiblemente sería una de las galaxias más brillantes del cielo, casi con seguridad visible con binoculares. 

Hasta la próxima.

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